Prohibido reírse en público (una historia de abuelete picajoso sobre tablets - para pasar el tiempo -)

nomaRags

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No, no es una nueva restricción o persecución del gobierno, referido a la cuarentena o a la censura impuesta en las redes sociales, ésto es menos grave, finalmente claro.

El tema, tiene que ver con los fotochismes, si, esos ingenios del diablo que los fotógrafos compramos para conseguir mas agilidad y precisión en lo que hacemos, y que, por lo general, cuando haces algo con ellos que no debes, te acaban complicando la vida.

Me voy al principio de los tiempos, año 2005, cuando comencé a trabajar con Ps, me compré una flamante y carísima Wacom Intuos 3 M, la cual, configuré para trabajar con mi Photoshop, y que hasta la migración de W7 a W10, me hacía perfectamente el trabajo de tableta y ratón, y la verdad, que muy bien.

El problema vino, cuando con W10, me vi obligado a utilizar además de la tableta un ratón como el que estaba acostumbrado en mi trabajo de entonces, con múltiples botones configurables para distintas aplicaciones, que me era muy cómodo. Al hacer esto, W10, decidió, que el funcionamiento de la tableta no era necesario, y comenzaron a perder precisión los scrolls, la presión, incluso, se volvía errático el movimiento del pen sobre la tableta. Pero que curioso, si desconectaba el ratón, y eliminaba sus drivers, todo volvía a funcionar correctamente.

Solución, cambiar de marca de ratón, pero con las mismas funciones. Fácil, sobre todo por que, estaba dentro de los 15 días de la compra. Pero, como os habéis imaginado, tras tres modelos distintos, el problema era el mismo, y como del ratón, no podía prescindir, y era inviable el desinstalar y reinstalar el ratón cada vez que lo usaba, tiré por el camino del medio.

A pesar de que la wacom, me ha dado un magnífico resultado durante muchos años, y sigue operativa con el portátil a día de hoy, decidí comprar una tableta nueva, y tras investigar, decidí probar una Huion New 1060 Plus, que increiblemente tenía un precio de menos de 70.-€ con gastos de envío incluidos.

Mi sorpresa desde el primer momento que la instalé, fue muy buena, y me hice a ella, muy rápidamente.

Todo iba genial, me sentía orgulloso de mi, por la magnífica compra que había realizado, ya que incluso por su mayor tamaño de la superficie de trabajo, era mas precisa que la wacom. Perdía los scroll, pero ganaba 2 botones.

Oh casualidades de la vida. en el año 2017, migro de Canon a Sony, y con ello, descubro un programa que había visto y oído de él, que se llama Capture One. Comienzo a familiarizarme con él, y en muy poco tiempo, se convierte en mi referente. Ésto implica, que los comandos asignados a los botones no coinciden, y el principal escollo que me encontré, es que no es posible configurar los botones de forma individual por programa, y yo había pintado sobre cada botón, con un rotulador de tinta metálica, la función asignada a cada acción, que por supuesto, no coinciden en los atajos de teclado en las dos plataformas.

A grandes males, grandes remedios. Como en C1, se pueden configurar todos los atajos de teclado como te de la gana, y en Ps, los por defecto, no los puedes cambiar, pero si puedes asignar otros a funciones que no tienen atajos, encontré la solución.

Papel, bolígrafo y el resumen de los atajos de cada programa en cada pantalla. Después de sopesarlo, nuevos atajos coincidentes en los dos programas, asignados a 7 de los 8 botones. Genial, soy un hacha, mis dos neuronas aún están ágiles.

Una vez realizado esto, abro el configurador de la tableta, configuro nuevamente los botones, abro los programas, y compruebo que todo va de perlas, pero, en cada botón ahora pone algo distinto a lo que hacen. Bueno, "no problem", alcohol isopropílico al canto y..., no sale la pintura. Bueno, pues alcohol de esterilizar. Pues tampoco.

Ummm, un limpiador de laca de uñas hidrolítico (base agua, no disolvente). Jo..., tampoco funciona, pero las letras brillan como venus en la hora azul, y la tableta ha recobrado su imagen original, recién salida del embalaje.

Si, eso mismo, lo hice, justo lo que estás pensando. Cogí entonces, el quita esmaltes "forte" o acetona concentrada. Y como sería de esperar, no se me ocurrió utilizar un bastoncillo, no, para nada, un trozo de algodón que tenía encima de la mesa de usar los productos anteriores, así que lo mojé adecuadamente, e hice una pasada rápida por los ocho botones. Y si, esta vez, si eliminó las letras, no dejó ni una en los botones, es mas, también se llevó en el algodón, parte de la capa superior de los botones, dejándolos de un mate rugoso, quizás menos resbaladizo que antes.

Os puedo garantizar que después de la limpieza con el isopropílico, estaba contento, porque la tableta parecía recién salida del embalaje, pero ahora parecen que el operario principal de la tableta, es un halcón peregrino con sus impresionantes patas.

Vale, estéticamente me la he cargado, pero ya puedo renombrar de nuevo los botones. A lo que me dispuse.

Cuando estaba ya todo realizado, por supuesto con rotulador de pintura metálica, decidí ponerme a editar una nueva foto, y cuando pulso el botón para que me abra una nueva capa en Ps o máscara en C1, ja, el botón, no baja, y el de al lado, tampoco, y el de debajo ..., tampoco, y así, todos.

La acetona, penetró por los laterales de los botones, y físicamente, soldó los botones de plástico, a la carcasa de plástico, y además, lo hizo igual que cuando utilizas grasa acelerante para soldar con estaño, por todo el perímetro, Así que, ahora no funciona ningún botón.

Por supuesto, eso mismo en lo que estáis pensando, es en lo que no pensé, o sea, ahora no funcionan los botones, pero si el pen y la superficie de contacto, con lo cual, en vez de utilizar los botones de acceso directo, utilizo el teclado y la tableta, sólo como tableta.

Destornilladores de precisión, romper el precinto de seguridad del tornillo central, despegar las gomas de las bases de los pies para acceder al resto de los tornillos, y desmontar todo el tinglado. Cuando ya tenía todo desmontado y los tornillos en un boté, para no perderlos, le di la vuelta a la carcasa, e hice presión sobre los botones para soltarlos de la carcasa, y..., ni de coña. Flexo la carcasa, casi hasta que veo que se va a romper, pero no se mueven ni una micra los p... botones.

Éste es el momento en que le pido a mi santa, que me pase la caja de los cuters, lo que en mis hijas provoca el comienzo de una apuesta abierta, con objetos de chicas. Al principio, la apuesta consistía en, cuanto tiempo tardará en cargárselo. A continuación, entró, la nueva modalidad de, se hará sólo un corte en los dedos, en media mano, se clavará el cuter en algún otro sitio del cuerpo, etc, etc.

Y como ya me he extendido sobradamente, y puede que la historia ya aburra, ¿quien y que apuesta ganó?

La mía. Conseguí cortar, digamos, unos nuevos botones, menos redondeados y, mas asimétricos, no simétricos y aburridos como los originales, mas acordes conmigo, y sobre todo, completamente funcionales. Es mas, ahora, con sólo apoyar el dedo encima, hacen click, sin necesidad de pulsarlos como antes, así que, considero que he mejorado el producto, aún que haya sido por accidente.

Como resumen final, si alguien está interesado en conocer de primera mano como funciona esta tableta digitalizadora, incluso como la tengo configurada, que me lo diga, que para eso se ha leído este ladrillo.

Unha aperta
 
Ramón muy interesante y didáctica tu disertación, lo mejor el resultado.

Por vocación primero y por profesión después el numero de episodios propios y ajenos, similares al descrito que he vivido darían para para unos cuantos tomos.

Con daños similares, en otro tipo de productos, las traían al servicio técnico para ver si les entraba en garantía, argumentando que en otros productos hacia algo parecido y no les pasaba nada.

Saludos
 

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