Sí, lo son. Los coches de caballos son, como otras muchas cosas allí, guiños al pasado. Por ejemplo, guiños al siglo XVIII o XIX. Te da la sensación de que a la vuelta de una esquina puedes cruzarte con Mozart, o Beethoven, o Schubert..., que salen corriendo de un palacio para llegar pronto a cenar a casa... O entras en una casa y sientes que dentro pueda estar Salieri o Clementi o..., tocando el vivace final de la última sonata que están ahora escribiendo...
Preciosa estampa de las calles, que como son tan distintas a las nuestras, aún llama más la atención. El color de la foto me parece muy agradable, además del detalle del carro de caballos, que está estupendo. Saludotes Wam.
Este sitio utiliza cookies para ayudar a personalizar el contenido, adaptar tu experiencia y mantenerte conectado si te has registrado.
Para continuar utilizando este sitio, debe aceptarse nuestro uso de cookies.